Por Dill
13:34 7/18/07
Cada vez más, la libertad, supremo atributo que se supone pertenece a todos los seres humanos, se pierde en una confusión difícil de desentrañar. Entonces, cabría decir, la esclavitud engrosa su cuerpo como una boa que va envolviéndonos poco a poco.
¿Qué cosas les son dadas elegir al hombre con total libertad? Preguntamos: "con total libertad".
El bebé hombre no elige nacer, ni elige a sus padres, ni elige su entorno, ni elige su educación. Sin embargo estas cosas parecen haberlo elegido a él. De alguna manera lo toman y van encauzando la evolución de sus pensamientos, creencias, en fin, todo lo que el Dr. Freud ya explicó tan bien en sus trabajos. Entonces: ¿nacemos esclavos? ¿Somos los hombres esclavos libertos?
De alguna manera, el bebé ya crecido y devenido niño sigue siendo un esclavo, primeramente de sus padres (¿esclavos?). Después debe seguir obedeciendo en el ámbito de la escuela. Podrá elegir a sus amigos pero no a sus enemigos (que seguramente han de tener una influencia no menor tampoco en la conformación de su personalidad).
Llegamos al tiempo del trabajo: ¿elige su trabajo? Suponemos que algunos sí y otros (la mayoría) no.
¿Elige el hombre pasarse tantas horas haciendo algo que tal vez le gusta muy poco o, quizás, le disgusta totalmente? ¿No son éstas, cosas de esclavos? ¿La obligación es compatible con la libertad? ¿En dónde radica la libertad cuando debemos hacer algo por obligación?
Pongamos el caso concreto de una persona que debe trabajar cuarenta años de su vida, pongamos, en una oficina, haciendo cosas que, en verdad, le importan tres pepinos. Pongamos que esa persona vive lejos de su oficina y pasa tres horas de todos esos cuarenta años viajando en colectivos trenes y/o subterraneos. ¿Alguien se animará a sacar la cuenta del tiempo que este hombre pasa haciendo cosas que no elige hacer? ¿Será que la esclavitud está reservada a los que no tienen una vocación y la "libertad" a aquellos que "eligen" cómo ganarse el pan? Y los que no tienen vocación ¿por qué no la tienen? ¿Es que les agrada vivir la mayor parte de sus vidas como si fueran esclavos acicateados por cadenas que ya no se ven pero se sienten?
La libertad ¿es una amiga que no está?
Para mi Hermano, Amigo y Compadre nebulano. No quería estar ausente en su nuevo refugio. Y auque estos leños estén un poco húmedos estoy seguro que nos juntarán alrededor del mismo fuego.
(Dill)
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